Alguna vez entendí aquello del "sistema de máquinas" y
hacia donde marchaba la idea de progreso, es una teoría filosófica, en lo que
nadie se detuvo es en los guantes engrasados de la tristeza, en la rutina
automática, en el no-ser, en la anulación de los contrarios, en el disenso y la
discordia, en las múltiples variables del caos, en los entramados y los
laberintos, en los subterfugios y las obliteraciones, nada de todo eso fue
evaluado a conciencia, se desplazaron conceptos y se eliminaron las
diferencias, como cuando vemos salir obreros de una fábrica, la misma ropa y el
mismo corte de pelo, la misma forma de caminar...
Hay quienes no pueden pensarse de otro modo, necesitan la
estructura que les fue impuesta, recorren los mismos pasillos y se vuelven a
casa creyendo que eligen su programa favorito, sentados al lado de una cerveza
y un control remoto, fingiendo que prestan atención…
Pienso que estoy un poco cansado de ser articulado por el
sistema, a veces soy consciente de que más allá de la voluntad de dominio que
uno tenga, las piezas del sistema se acomodarán naturalmente, nos parecerá una
de esas anomalías que buscarán en vano des-balancear una probabilidad.
No entiendo porque no puedo abstraerme lo suficiente de todas
estas trivialidades.
Las ofrezco en silencio, y me convenzo inútilmente de su
inutilidad.
Ahora estoy viendo un inmenso carguero negro siendo guiado por
una pequeña lancha. Va lleno de containeres, modifica una parte del horizonte.
Parece que nadie se da cuenta lo invisible de ese barco. Entonces creo que solo
la escritura de un poema puede hacer trizas esto que nunca debimos conservar.
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